Este fin de semana se desarrollará una de las carreras más esperadas por todos los corredores de trail en Chile, el Endurance Challenge 2014, que en esta oportunidad, aparte de los cambios de rutas, incluye la no menos despreciable distancia de 160km.

Todos parecen completamente extasiados y expectantes por correr las 100 millas. Tantas veces hemos escuchado sobre Western States, UTMB, UTMF y cuanta 100 milla que hay en Estados Unidos y finalmente tenemos la primera 100 millas de montaña en Chile. Recordemos que la primera 100 millas se organizó en el norte de Chile a principios de este año, la cual no se pudo completar por problemas de clima.

Pero, por qué correr 160km? Por qué intentarlo? Para qué hacerlo?. La verdad es que nunca me hice estas preguntas antes de correr el UTMB, pero si llegaron a mi cabeza después de correrlos -estas y muchas otras-. Pero bien, no pretendo contestarlas aquí, solo quiero plantear la inquietud y desarrollar mi reflexión sobre lo que fue correr el UTMB. Esto no es un race report, son las ideas y conclusiones que obtuve luego de terminar la carrera y en una que otra conversación que tuve con amigos corredores, no corredores y gente que no corre.

Todo el mundo habla de lo maravilloso e increíble que es correr en cerro, pero pocas veces nos cuentan esos momentos oscuros y donde pasamos más de un mal rato. Aquí quiero resumir un poco de ambos lados.

100 millas! Eso es mucho. Cuántos días?

La verdad es que esta afirmación tiene 2 caras. Por un lado no es mucho, 100 millas se pasan bastante rápido cuando estás determinado a completarlas. La primera mitad de carrera es pasa sin darnos cuenta y si llegas bien a este punto realmente sientes que luego del km 80 comienzas a esforzarte por terminar.

Pero por otro lado, creo que hay un límite donde el cuerpo es capaz de correr, realmente correr en la montaña, donde empujas cada subida al máximo y donde en cada bajada y plano quieres correr para llegar rápido al próximo punto. Creo que la distancia corrible para mi son los 120km o algo cercano a eso. Es muy probable que para otros este numero sea mayor o menor, pero es aquí donde comencé a hacer cortocircuito. Ya los sabores no son los mismos, el agua no sabe igual, la soledad ya no es tu única compañía y es donde muchas veces comienzas a buscar a esa persona que conociste unos kilometros más atrás para ver si pueden avanzar juntos hasta el final.

Un verdadero infierno.

Del kilometro 120 en adelante, no se si es de forma sicológica o qué, pero mi cuerpo y mente pedian detenerme. Ya queda “la última maratón” y sientes que todo está más cerca, pero a la vez los tiempo se dilatan y las distancias se acortan, te haces más pesado y más pequeño. Para mi esta es una zona oscura donde los peores temores y dudas comienzan a aparecer. La única forma de mantenerse en movimiento es tener un objetivo claro y aferrarse a él. Si no tienes eso es muy difícil avanzar.

Particularmente, el UTMB se divide en dos partes, la primera parte hasta Champex – Lac (123km) donde la carrera es bastante corrible, más de lo que uno cree, y la segunda parte desde Champex – Lac hasta Chamonix, donde la carrera pasa a ser un calvario interminable con subidas y bajadas que destruyen todas tus esperanzas, cálculos de tiempo y distancia. Creo que por esto mismo es que el UTMB para mi llegó hasta el km 120. Lo que sucedió después no era el UTMB, era un calvario. Cada subida era una lucha enorme por llegar al punto más alto deseando que en la bajada mis pies pudieran aguantar cada una de las pisadas.

Si hoy puedo elegir una distancia donde me siento cómodo, está entre los 80km y los 120km.

Uno corre más de lo pensado.

No me caracterizo por ser un corredor que corra las subidas y bajadas, más bien soy un corredor que a punta de bastón busca subir lo más rápido que puede y baja corriendo. Aquí me di cuenta que para correr 160km debes ser capaz de correr más de lo que piensas, debes correr en plano durante largas horas, debes correr en las bajadas durante varias horas. Para subir, puedes seguir bastoneando cada uno de tus pasos. Lo primero que haré para entrenar una distancia mayor a 80km será correr en plano. La mezcla será un tanto extraña pero debe existir una proporción adecuada para cada carrera.

No todo es negativo en una 100 millas, en muchas oportunidades tendras destellos de lucidez en las piernas, que harán que corras con la fluidez y soltura que se hace un 10k o como el mejor de tus entrenamiento en tu cerro o sendero favorito. Estos son los momentos que debes aprovechar para avanzar rápido y aprovechar el tiempo para descontar kilometros. El ultimo de estos momentos lo tuve en el km 110 y luego desde La Flégère a Chamonix. En este último tramo no existía mucha fluidez ni soltura pero fue bastante agradable poder correr el último tramo antes de la meta.

Paso a paso

La carrera debe ser tomada con calma, tal como en cualquier primera carrera, si es tu primera vez corriendo 100 millas, ólvidate de los tiempos, al menos olvídate de esos tiempo en cada uno de los puestos de abastecimiento. Preocupate de alcanzar y pasar al corredor que va adelante, preocupate de llegar al siguiente abastecimiento. Metas de corto plazo y que sean realistas son mejores que un objetivo exacto de tiempo, donde unos minutos de diferencia entre tu programación y la realidad pueden sacarte de la carrera, y hacerte pensar que debes recuperar esos 3 minutos que perdiste en el km 21, por haber comido un plátano más.

Lo importante aquí es terminar, por lo tanto da lo mismo el tiempo, no debes demostrar nada a nadie. Si tu meta eran 24horas y no lo logras, qué sucede? No sucede nada. En tu segunda 100 millas preocúpate del tiempo.

Te volverás más lento

Sí o sí te volverás más lento. Tus músculos están exhaustos, ya no comes ni tomas como lo hacías hasta el km 80, tus pies hinchados y lo único que esperas es que la meta aparezca pronto pero cada vez está más lejos. Manten la calma, por que tarde o temprano llegará ese destello de lucidez corporal para aprovechar avanzar.

Estas sensaciones y quizás otras más serán alguna de las que puedan sentir en 100 millas. No serán en el mismo orden, pero de seguro aparecerán en algún momento en mayor o menor grado.

Es necesario correr una 100 millas?

Si, es necesario. Es necesario que existan unas cuantas 100 millas en Chile -con 3 tendríamos de sobra- pero hay que ser conscientes que entrenar una 100 millas toma mucho tiempo y dedicación. No es salir de la casa y dar una vuelta a la manzana (para el 99,9% de los mortales). 100 millas es mucho más que la distancia o la carrera misma. Pero hay que intentarlo una vez al menos, aquí vas a descubrir si esto es lo que realmente quieres hacer o no, vas a descubrir si tiene límites antes de los 160km o quizás después de los 160km.

Las 100 millas ayudarán a tener corredores mejor preparados y con mayor experiencia. Tener una carrera de 100 millas es una oportunidad que hay que aprovechar mientras seamos capaces de hacerla.

160 kilometros pasan muy rápido, así que hay que aprovecharlos. A la vez es un viaje bastante largo como para pasarlo mal durante todo el trayecto, solo queda disfrutar cada momento.

Bonus track – Retírate

Estamos bombardeados por frases que invitan a finalizar cualquier cosa que nos propongamos, todos piensan en el éxito, todo el mundo te alienta y te alentará para que termines, todos piensan en la meta y ese abrazo en la llegada. Te invito a retirarte de la carrera, para que sepas conozcas los momentos difíciles, pero retírate orgulloso de lo realizado, retírate habiendo dado hasta la última gota de esfuerzo, retírate kilometros más lejos de donde debías haberlo hecho; esto ayudará a confirmar tu idea o a deshecharla. No puedes retirarte por cualquier motivo, solo puedes hacerlo cuando dejas de disfrutar lo que estás haciendo. Nadie nos paga por hacer lo que hacemos (ni siquiera a los elite(a algunos si)) y si queremos seguir corriendo debemos cuidar el cuerpo, es el único pago que nos podemos hacer.

Disculpen las faltas ortográficas pero no cuento con todas las herramientas para corregir el texto.