2013, un año de cambios

Siempre es difícil escribir sobre lo que ha sido un año. Este 2013 lo definiría como un año de cambios. Algo sucedió, en como vemos correr en cerro en Chile.   Hace un buen tiempo que se está corriendo por los cerros en Chile. Sin lugar a dudas existe una demanda por carreras más largas, técnicas y desafiantes, de a poco vemos que nacen nuevas alternativas que están generando un cambio en el concepto de las carreras. X Trail Puchuncaví tuvo cerca de 400 corredores en su segunda versión, Trail Running Putaendo fue una verdadera revelación, con un circuito duro, bello y entretenido, Vulcano Ultra Trail se acerca al concepto impuesto por el UTMB, de correr a los pies de alguna montaña importante, sin duda un buen proyecto con un gran potencial a futuro, Andes Infernal, la ultra maratón que se corre a mayor altura en el mundo se hace cargo de la cordillera central y aprovecha las instalaciones de los centros de esquí en verano, época del año donde debiéramos ver a la mayor cantidad de corredores entrenando en altura. Trail Running Arica, pone al norte de Chile y su agreste desierto en la mira de los corredores. Y no es casualidad que todas estas carreras estén hechas por corredores. En otras carreras, tenemos a Cerro Castillo que establece los cimientos para las carreras por etapas en el país y finalmente Patagonia International Marathon con un recorrido por la octava maravilla del mundo, en plenas Torres del Paine. Esto, solo por nombrar algunas carreras que tienen un concepto detrás, precisamente eso era lo que estaba faltando, tampoco digamos que con esto ya estamos listos, pero este es el comienzo de algo bueno.  

Afortunadamente Vulcano Ultra Trail logró cumplir los requisitos para entregar 2 puntos para el UTMB, ya con esto solo faltaría una carrera que entregue 3 puntos para Mont Blanc y tenemos un año de carreras importantes en Chile. Aun así y con el potencial que existe en Chile, debemos viajar a otros países para conseguir los puntos necesarios para participar en otras carreras, como Western States, Hardrock o UTMB, siendo que en Chile podríamos tener iguales o mejores.  

En cuanto a los corredores, estos cada vez son más exigentes y hasta ahora no hay carreras que cumplan todas sus expectativas. Está bien, estamos de acuerdo en que no podemos tener una de 100 millas todos los meses, pero se hace necesario tener un calendario de carreras más ordenado y exigente a lo largo del año. Aquí es cuando automáticamente volvemos al tema de las carreras, porque sin carreras exigentes, no tendremos mejores corredores.  

Aún hace falta trabajar en la programación de un mejor calendario de carreras en que se distribuyan homogéneamente durante el año, por ejemplo haciendo uso de los meses de verano. No es necesario que todas las carreras sean en Santiago o la quinta región, los organizadores y productores pueden enfocarse en hacer pocas pero realmente buenas. Ojalá logren involucrar a las comunidades o ciudades donde se realicen. De esta manera pueden ser muchos los beneficiados si productores, Gobiernos Regionales, Alcaldías o Clubes trabajan al mismo tiempo en sacar adelante un carrera. Quizás hoy no está el número de corredores que necesitan las productoras para hacer una carrera de 100 millas, pero debemos comenzar por algo y de seguro que el número de corredores aumentará. Si no son chilenos, serán extranjeros.

Algo que me impresiona es que en la primavera de 1963 el Presidente John F. Kennedy impulsaba la primera versión del JFK 50 Mile en Estados Unidos, la cual era una de muchas carreras que nacieron con el espíritu de devolver la condición física al país. Nos está haciendo falta esta visión donde intentemos responder qué es lo que queremos con este deporte. Una de las cosas que quiero es que Chile sea un destino para correr, deseado por todos. Afortunadamente, podemos revisar la historia de varias carreras en otros países para saber cómo se iniciaron y luego hacer lo que debemos para no caer en errores y así llevar este deporte a un nivel superior.

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